martes, 1 de mayo de 2007

"Despojos" 4

"Despojos pinamarenses"
el periódico que muestra sin asco la otra cara
del Encuentro Bucal “coros en el bosque”

año 1 número 4


Pinamar. Télam (eto) por Horacio Verguiti, nuestro periodista apostado en el lugar.

CORALISTAS CARIBEÑOS ACOSAN EN MARCO FESTIVO
A CANDIDO BARITONO SUDAMERICANO

Una escena sin precedentes en nuestro tradicional bistró pinamarense, especialista en matambre con rusa, se suscitó en horas de la noche durante la desenfrenada fiesta organizada por el vergonzante "Coros en el bosque". Una vez finalizada la exquisita y opípara cena, los garcons del lugar procedieron a retirar algunas mesas del recinto comederil para dar lugar al desenfreno danzante de algunos coralistas, deseosos de refregarse con sus congéneres. Aprovechando la lujuria y la narcotización reinante, un grupo de desviados en celo de origen potoriqueño intentaron montarse en alegría junto con un barítono del grupúsculo Alde Roce, que contamplaba extasiado las contorsiones lascivas de los coralistas desbocados, aunque expectante y con cierto disimulo. Cabe destacar que el porte varonil y greco-romano del citado barítono hizo derretir a más de un coralista, deseoso de amar al prójimo como a sí mismo (una clara actitud onanista, esta última). Declaraciones potoriqueñas efectuadas a nuestro apostado hacían hincapié en la hombría y los bellos cantos del coralista alderocista: "es que con ese look Clark Kent, si lo llevamos a nuestra cama redonda, lograremos que emerja el Superman que lleva adentro", vociferaron a coro, mientras salticaban en el lugar. Otra muestra más del profundo daño que actitudes como éstas provocan al movimiento bucal argentino.

DESENFRENADA CONTRALTO OFRECE FELLATIO PUBLICA
A DESPREVENIDO Y APUESTO TENOR

Repugnancia y honda conmoción en restó Pampa Grill

Pinamar. Télam (eto) por Horacio Verguiti, nuestro periodista apostado en el lugar.

Otra escena inusitada producióse en este distinguido y señorial comedero cuando en el fragor del citado desenfreno fiestil, una contralto algo escasa de estatura, perteneciente al ya citado calante grupúsculo Alde Roce, tomando como excusa el ritmo danzante que imperaba en el lugar en ese momento (una música extranjerizante e incitadora a los bajos instintos denominada rock y roll) intentó en forma infructuosa iniciar una fellatio a su compañero, un distinguido y correcto tenor que intentaba pasar un bonito momento. Tamaña actitud ante tamaño miembro fue llevada a cabo frente a dos centenares de coralistas que, azorados, detuvieron sus danzas y vituperaron a la citada desenfrenada por su baja moral y dudoso don de gentes, aunque alabaron su buen gusto por el tipo de caballero y miembro elegido. La escena no pasó a mayores porque personal de seguridad tomaron a la susodicha por las crines y la retiraron del recinto, mientras ésta vociferaba: "yo soy rebelde porque el mundo me ha hecho así". ¿Hasta cuando los rectos de actitud deberemos tolerar a estas multiorgásmicas personas, que con semejantes conductas renuncian a la poca racionalidad que aún les cabe?

No hay comentarios: